La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica la aparición de la resistencia a los antibióticos como una de las mayores amenazas para la salud humana. En las últimas décadas el desarrollo de nuevos antibióticos disminuyó, perdiendo así opciones de tratamiento para las infecciones bacterianas resistentes. En los últimos 40 años, sólo se han introducido dos nuevas clases de antibióticos en el mercado farmacéutico, los enfoques existentes en años anteriores para descubrir nuevos antibióticos no fueron muy promisorios . Así, la oportunidad de mercado de biomoléculas antibióticas de origen natural como estructuras de fármacos es alta. Este mercado prometedor se ha generado por la aparición continua de patógenos resistentes a los antibióticos y aunado a la falta de nuevos compuestos bioactivos. Sin embargo, la fuente histórica de la mayoría de los antibióticos existentes, así como de muchos otros fármacos no se ha agotado; así, los microorganismos son fuente promisoria de nuevos fármacos. Los descubrimientos recientes demuestran que hasta el momento las fuentes no explotadas deben tenerse en cuenta, siendo los microorganismos marinos los menos estudiados si se comparan con sus homólogos terrestres. Por lo tanto, la probabilidad de encontrar nuevas estructuras clave dentro del metaboloma de las bacterias marinas es alta. Este proyecto entre la Universidad Nacional de Trujillo - Perú y la Universidad Justus Liebig de Giessen - Alemania, tiene como objetivo encontrar moléculas con actividad antimicrobiana a partir de bacterias marinas.