El estudio del permafrost en los Andes tropicales y del Perú es un campo de la ciencia casi sin antecedentes. A excepción de los hallazgos de permafrost del proyecto CryoPeru en los volcanes Coropuna y Chachani (Ubeda et al. 2015) y algunas estimaciones preliminares (Carey et al. 2012; Haeberli, Schaub, y Huggel 2016; Haeberli et al. 2010), no se han registrado más investigaciones en este campo, a pesar de que el permafrost representa una reserva de agua potencialmente significativa y cuya contribución de agua dulce es probable que aumente en el futuro a medida que los glaciares desaparezcan y/o se retiren hacia elevaciones superiores en respuesta al cambio climático en curso. Actualmente en el Perú existen pocos estudios sobre su distribución, y no existe ninguna información sobre las formas de permafrost presentes, se sabe por algunos estudios puntuales de su presencia en glaciares de roca y paredes de roca, pero no han sido identificados a nivel del Perú y mapeados para su estudio y posterior valoración como recurso hídrico. También es importante su estudio por su respuesta lenta a los cambios climáticos y condiciones ambientales actuales, por lo que permanecerá mucho tiempo después del retroceso de los glaciares limpios o descubiertos. Por otro lado, tampoco se cuenta con una metodología para su identificación que permita una estandarización en el reconocimiento e identificación del mismo. La información generada a través del mapeo de las formas de permafrost a nivel nacional permitirá conocer el potencial de reserva hídrica presente y futura.