La vicuña tiene como recurso principal la fibra, obtenida tras la esquila, actividad que realizan los comuneros al menos una vez al año, llamada Chaccu (Cabanillas & José, 2018). Los parásitos gastrointestinales pueden influir de manera negativa en la salud de las vicuñas, afectando tanto su condición corporal como su producción de fibra. Basados en la experiencia con las parasitosis en animales domésticos se han empezado a tomar algunas medidas para mitigar estos problemas. Sin embargo, las vicuñas, debido a su condición de silvestría, no se cuenta con mucha información y, por ende, no debería ser tratada con frecuencia (Cabanillas & José, 2018). Además, el uso empírico de los fármacos antihelmínticos puede generar costos elevados y el desarrollo de resistencia parasitaria. Los estudios epidemiológicos son elementos claves en el desarrollo de mejores programas de control para las parasitosis. En este tipo de evaluaciones se pueden determinar las variables de riesgo para la transmisión de estos parásitos. Las variables ambientales, índices de masa, tipos de pastizales, pueden tener un efecto significativo sobre la presencia de ciertos parásitos. Al tener un mejor conocimiento sobre estas relaciones se podrán realizar medicaciones mucho más adecuadas para el control de está parasitosis en las vicuñas.